Archivo AIRE. J Casellas

En 1992 puse en marcha, junto con Agnes Ramírez y Ernest Puig, el proyecto AIRE en forma de revista postal; es decir, una revista en formato postal (10x15cm) que se enviaba por correo con la consigna "Espai de pensament artístic" (Espacio de pensamiento artístico) y que después ampliaría con laconsigna "per una ecología de l'art" (por una ecología del arte).

La idea en la que se basó el proyecto fue, desde el principio, trabajar con los recursos accesibles, adaptándose a ellos, evitando la espectacularidad (tan en boga en aquella época olímpica!) y considerando el contexto y lo efímero. Por ello, los procedimientos artísticos eran cada vez, con más frecuencia, el arte postal, la intervención efímera y la acción o performance.

AIRE se convertirá rápidamente en una pequeña pero persistente plataforma organizativa y de promoción del arte de acción de un círculo abierto, aunque inevitablemente reducido. La vertiente archivística, que paulatinamente irá adoptando un carácter central en el proyecto, surge de forma espontánea, y en contraste con las otras actividades del proyecto AIRE. No se planifica ni teoriza en un principio, sencillamente mi doble condición de accionista y fotógrafo me lleva a documentar las reuniones y festivales en los que participo..."

"En 1997 se incorporó al archivo el joven accionista y también fotógrafo Xavier Moreno. El archivo amplió su capacidad material y crítica, ya que confrontamos y discutimos todos los aspectos de la práctica documentalista. Los resultados de esta dialéctica-práctica se manifestaron fructíferamente durante la presentación del archivo en el Palau de la Virreina de Barcelona en el año 1998 y en la exposición DOCUMENT-ACCIÓ de la Sala Can Felipa de Barcelona al año siguiente.

A medida que el archivo se convertía en un proyecto consciente y decidido, surgieron cuestiones anteriormente resueltas por el azar y la intuición. ¿Qué fotografiar, cuáles eran los límites y la dirección del archivo? La transversalidad de las cosas es lo que las convierte en atractivas y útiles, pero, para que esta transversalidad sea efectiva, se debe determinar una posición con la que interactuar. Es necesario dibujar un mapa, aunque éste sea mutable; es decir, reducir y delimitar, comprometerse de algún modo..."

"Simultáneamente, referente a la elección de lo que aparece y al "cómo" se documenta una acción, he procurado ser fiel y explicarlo en la medida de lo posible. Desde que la fotografía es un arte, esta cuestión parece complicarse en preocupaciones creativas del fotógrafo, que, muchas veces, no tiene una voluntad funcional y también por disquisiciones filosóficas estériles. Que la fotografía no pueda sustituir la acción no es equivalente a que no la explique de alguna manera, de hecho nada existe aisladamente, ni la propia acción en este caso, y todo se interrelaciona. Resumiendo, desde mi punto de vista, la fotografía resulta más insignificante en la acción en la medida que ésta es pseudoescénica o teatral y resulta más efectiva cuanto más opera como procedimienlo de arte conceptual..."


	Nel Amaro. Primera acción de Nel Amaro. Festival FIARP 2, Madrid, 1992. Foto: Joan Casellas	Pere Sousa en el Heliogàbal de Barcelona

Esther Ferrer, acción en el ciclo "La acción y su huella" en el CGAC, Santiago de Compostela. Fotos: Joan Casellas	Pascal Comelade y Enric Casasses en uno de los festivales Proposta	Accidentes polipoéticos, Associació Cultural Heliogàbal, Barcelona, 1994 Foto: Joan Casellas

"Eventualmente, surge la pregunta de cómo dar salida a todo este material. Las exposiciones son una forma de ordenar y reflexionar sobre el material; entonces aparecen los mecanismos de exposición como los murales- collage o los atriles, las proyecciones de diapositivas y los dossiers. El trabajo explicativo se convierte en creativo y aparecen otras posibilidades como la recuperación del movimiento con el zootropo u otros aparatos ópticos. La fotografía y la imprenta se relacionan íntimamente, y de este modo la edición de postales y pósters es otro campo de acción propicio. Las revistas y diarios representan una de las mejores oportunidades para difundir el archivo con artículos especializados. La limitación de imágenes por artículo me ha llevado a crear composiciones-collage en las que, en una sola imagen, reúno a diez o veinte artistas; es interesante comprobar como una fotografía puede ser editada y reeditada ilimitadamente sin perder su sentido básico. A su vez, ésta va adquiriendo otros nuevos e inesperados sentidos, los cuales la rodean inevitablemente en el proceso de difundir un conjunto documental surgiendo un proceso creativo de forma natural. En este punto, AIRE cierra el círculo unificando los aspectos de documentación y edición, especialmente en la promoción de la foto-acción; a saber, la acción específicamente pensada o representada por el medio fotográfico. El proyecto "fotomatón" de 1995 representa el inicio de una serie de proyectos de foto-acción; en este caso, la cabina de fotomatón se convertía en el estudio-escenario óptimo para pensar y realizar una acción que después se publicaría en un póster exposición. El uso y sentido más completo del archivo será su eventual catalogación exhaustiva con toda la información complementaria que permita consultas en perspectiva y desde diferentes puntos de vista en un centro de consulta físico o virtual.

El archivo AIRE parte de una idea sencilla: dejar constancia de un mundo artístico basado en lo efímero y de proceso que, en su desarrollo y difusión, se define como un proyecto ideológico, tanto en los contenidos como en los procedimientos, y que puede asumir un carácter creativo sin renunciar a ser un instrumento útil y explicativo."