En los años 70 Sanja Ivekovic se hace conocer como la pionera del videoarte y de los movimientos artísticos femeninos. Hoy en día, ella es la personalidad clave del arte no conformista y de los movimientos pacifistas en Croacia. El Projet Fraënhaus es el resultado de los debates  que la artista ha mantenido durante muchos meses con asociaciones de mujeres en Croacia y Luxemburgo.  

Sobre la fachada acristalada del Musée d'Histoire de la Ville de Luxembourg ha escrito los nombres de una veintena de mujeres, los cuales,  una vez finalizada la Manifesta, permanecerán  en   los centros de acogida para mujeres maltratadas de Zagreb y de Luxemburgo. Los folletos contienen información detallada sobre cada una de estas mujeres y estarán disponibles en todos los lugares de la exposición. Así se establece un lazo entre el espectador de la exposición y las mujeres en cuestión.  

En el Musée national d'histoire et d'art Sanja realiza una instalación con la impresión de los rostros de estas mujeres acompañados por la lectura de sus historias personales. Las máscaras son presentadas en un entorno, de este modo, natural, que es el que se encuentra en los departamentos de etnología de ciertos museos.  

Sanja interroga las relaciones subyacentes entre el ideal de belleza  y la violencia, entre el icono y el conflicto, relaciones que son consideradas nuevas variaciones sobre un tema intemporal de la historia del arte.