La acción
y la instalación, como disciplinas artísticas, son espejo
una de la otra. Ambas están basadas en el mismo principio de
presencia; de presencia activa. En la performance, la presencia del
artista; en la instalación, la del espectador. Así, reflejadas
una en la otra, instalación y acción toman direcciones
opuestas pero superpuestas, creando un eje entre dos polos –el
artista y el espectador– a lo largo del cual existen infinitas
posibilidades de interacción.
THOM KUBLI: Record Attempt
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