entidades

> Introversiones
Aspectos de la colección
Del 7 de febrero al
31 de agosto de 1997

Comisaria:
Antonia M. Perelló

volver

 

Esta exposición quiere explorar opciones de trabajo y de exhibición de algunas obras que forman parte de la Colección del MACBA. El Museo presenta en esta ocasión obras de su fondo de manera temática, con el objetivo de mostrar la diversidad de lecturas contenidas en una misma obra y de aspectos bajo los cuales puede ser presentada.

Introversiones nace de la evidencia de que algunas obras contienen un hálito de vida, un latido, una pulsión casi física. Son obras en las que intuimos una presencia escondida; desde estadios germinales de vida hasta la evolución de su ausencia, nos hablan de su fragilidad, del transcurrir del tiempo, de la materialización de temores atávicos. Son obras que comparten raíces vinculadas al surrealismo y al expresionismo, entendidos no como movimientos artísticos sino como formas de acercamiento a la obra de arte.

El arte y la vida están muy cerca en estas obras impregnadas de elementos introspectivos y autorreferenciales, y los límites entre ambos se desdibujan. La sensibilidad hacia el mundo íntimo y personal del artista, que es un rasgo característico de buena parte del arte actual, revela un nuevo interés compartido por el sujeto, por su sentimiento y su pensamiento. Los factores espirituales y físicos que conforman la identidad del artista, que lo materializan, se convierten en los materiales expresivos más cercanos de que dispone. Este no es un comportamiento nuevo dentro del arte. Las esculturas de Giacometti, las muñecas monstruosas de Bellmer, las pinturas de Yves Klein, los accionistas vieneses, los performers de los años sesenta y setenta, Acconci, Pane..., ya exploraron muchas de las posibilidades del cuerpo como medio de expresión artística. El tiempo y el miedo son protagonistas en nuestros días. El tiempo que transcurre inexorable y el miedo a desaparecer, de estar sujetos a un devenir que, independientemente de nuestro deseo y de nuestra voluntad, se desarrolla sin parar. De alguna manera es un sentimiento próximo al de las gentes de finales del primer milenio o al del hombre manierista que veía como el mundo antropocéntrico de sus antepasados se hundía a su alrededor.

En esta exposición queremos presentar otras que, utilizando una gran variedad de recursos, transmiten un presentimiento de vida interior que puede derivar hacia reflexiones sobre conceptos vitales (existencia, vida, muerte, etc.) o bien sobre la propia obra (cuestiones de representación, ficción, realidad, etc.). Sin ser narrativos, ni forzosamente figurativos, queremos hablar de estados de ánimo y de sentimientos reales en los que el espectador se encuentre reflejado o incluso cuestionado. La posibilidad de establecer los límites entre vida y arte, la relación entre el individuo-artista y el individuo-espectador, las formas de representación, la presencia-ausencia..., son algunos de los aspectos que Introversiones quiere abordar.

Frederic Amat, Tonet Amorós, Joseph Beuys, Chistian Boltanski, Louise Bourgeois, Carmen Calvo, Victoria Civera, Félix González Torres, Antony Gormley, Ramón Guillén-Balmes, Anish Kapoor, Eva Lootz, José Maldonado, Ángeles Marcos, Pedro Mora, Reinhard Mucha, Juan Muñoz, Michekngelo Pistotetto, Juan Carlos Robles, Joan Rom, Kiki Smith, Susana Solano, Jana Sterbak, Rosemarie Trockel, Jan Vercruysse, Bill Viola... son algunos de los artistas presentados en esta exposición. Se trata de una muestra expansiva en la que el mundo interiorizado de muchas de las obras encuentra su contrapunto en la fuerza centrífuga que desprenden los conjuntos creados.

>Ramón Guillén Balmes
Arqueología de artista, 1991-1992
Panoplia (modelo de uso), 1992

Arqueología de artista es un conjunto de objetos que están a medio camino entre el elemento orgánico, la prótesis y la herramienta. Hay en todos ellos una referencia ambigua al cuerpo, aunque sea con una sutil insinuación de encontrarnos en presencia de órganos o visceras vitales. "Que la obra de Ramón Guillén-Balmes se haya desplazado progresivamente del registro de una mecánica arcaica, concebida para evaluar los elementos al aire libre con una panoplia de órganos colgados de la pared o suavemente depositados sobre unas tablas dispuestas a manera de peanas, corresponde evidentemente al orden normal de las cosas: el órgano es un utensilio íntimo; solamente actúa en la oscuridad y en secreto, como si la revulsión visceral que su contacto está siempre a punto de provocar hubiera de ser moderada por la delicadeza de actuar únicamente por dentro. No ignoramos lo que esta manera de actuar por dentro tiene de perverso, como todas las palpaciones escondidas, las caricias íntimas, todos los repliegues sobre sí mismo destinados a saborear la inquietud. Pero lo esencial del espíritu de esta obra puede encontrarse justamente aquí: en esta identificación paradójica o esta fina superposición de la delicadeza y la perversión, de la ética del gesto y de sus insinuaciones. [... ] La prótesis juega con dos barajas: continua pegándose al cuerpo y se ajusta tanto y tan bien que, por mecánica que sea, transmite al utensilio la carga ambigua de los órganos y el calor de las visceras. Esta unión, ampliamente establecida por Ramón Guillén-Balmes en la explotación que hace de esta vena, asegura la extensión de la pulsión libidinosa y de su flujo perverso o su medida ética a la totalidad de los objetos del mundo."

(Hubert Charbit, Premières commandes, 1993)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Introversiones del objeto

>Obra que ha servido de pretexto a la Jornada Intro/versiones del objeto realizada por Geifc, Grupo de estudio de los fenómenos contemporáneos